papa-cua.jpg

La histórica gira de Francisco por Estados Unidos fue el escenario en el que el papa recordó la pregunta que hace unos años le hizo un niño y que lo puso en aprietos. La anécdota despertó las risas de los presentes.

El sumo pontífice dejó de lado la formalidad del discurso que improvisaba en el Encuentro Mundial de las Familias en Filadelfia y recordó una anécdota. Hace unos años, un niño le preguntó: «¿Qué hacía Dios antes de crear el mundo?». En medio de la curiosidad que le despertó el interrogante, el papa buscó la forma de responder, pero no fue fácil.

 

«Les aseguro que me costó contestar», reconoció Francisco, según reprodujo el portal El Comercio, y agregó: «Le dije lo que les digo ahora a ustedes: antes de crear el mundo Dios amaba, porque Dios es amor». «Era un hombre tan grande y desbordante de amor que no podía ser egoísta, tenía que salir de sí mismo para tener a quién amar fuera de sí mismo y ahí Dios creó al mundo. Ahí Dios hizo esta maravilla en la que vivimos y, como estamos un poquito mareados, la estamos destruyendo», expresó.

 

Ante la atenta mirada de los miles de presentes, el papa continuó: «Todo el amor que hizo en esa creación maravillosa se la entregó a una familia». Después, dejó un momento para las sonrisas. «Padre, usted habla así porque es soltero», se rió de sí mismo y agregó: «Es verdad. A veces en la familia vuelan los platos, A veces los hijos traen dolores de cabeza. Y no voy a hablar de las suegras». Las risas se generalizaron y permitieron continuar el encuentro en un clima muy distendido.

 

Después, Francisco recuperó el tono serio y siguió su improvisación: «Todo el amor que Dios tiene en sí, toda la belleza que Dios tiene en sí, toda la verdad que Dios tiene en sí, la entrega a la familia», publicó ACI Prensa, que concluyó: «Una familia es verdaderamente familia cuando es capaz de abrir los brazos y recibir todo ese amor».

 

(RT)