Luego de 20 años el Ejecutivo oficializó el incrementó del precio de la gasolina que se había postergado, previendo impactos políticos y sociales que incluso pudieran afectar la valoración de la Gestión de Gobierno, a pesar de que la posibilidad de que se desencadenara un Caracazo era “poco factible”, según analistas.
Para 1989 la economía sufría una contracción de 8,1%, la inflación se ubicaba en 84,5% y la pobreza cerca del 62%. Para entonces el detonante de la revuelta social fue la pretensión de los transportistas de subir los precios un 50%, pese a que sólo estaba autorizado un incremento no mayor al 30%.
En la actualidad, el Producto Interno Bruto se contrajo 5,7%, y según las cifras oficiales del Banco Central de Venezuela (BCV) la inflación cerró en el año 2015 en 180,2%. Adicionalmente, en días recientes se produjo el alza de la gasolina de 91 octanos en 1.282%(Bs. 0,070 a Bs. 1 por litro) y de 95 octanos en 6.000% (Bs. 0,097 por litro a Bs. 6 por litro).
Para mayor coincidencias de situaciones, el intento de aumento del pasaje en las rutas urbanas, suburbanas e interurbanas de un 100%, coronan un escenario plagado de paralelismos.
Decisión respaldada en 2016
El Monitor país de Hinterlaces reveló que en febrero de 2016 el 70% de los venezolanos dijeron estar de acuerdo con el incremento anunciado, mientras que 29% indicó que estaba en desacuerdo.
Las autoridades gubernamentales encabezadas por el ministro de Transporte y Obras Públicas, Luis Sauce, habrían manifestado que tal ajuste no significaría un aumento en las tarifas del transporte público. Sin embargo, 19 días después de los anuncios, habitantes Baruta de Caracas, protestaron por el cobro del aumento del pasaje de 20 a 40 bolívares, sin ser publicado en la Gaceta Oficial.
Aun cuando el ministro Sauce ha enfatizado que el incremento no está autorizado; el presidente de la Federación Nacional de Transporte, Erick Zuleta, declaró que el aumento estaría vigente desde el pasado 18 de febrero y que los transportistas solo pusieron en ejecución el acuerdo, aunque no se ha publicado en la Gaceta Oficial, por lo que pidió a los alcaldes la formalización de la medida.
Zuleta afirmó que alrededor del 80% de unidades en rutas sub urbanas usan gasolina e interurbanas utilizan gasoil “por ello cuando el usuario pregunta por qué el aumento nos referimos al uso de gasolina, costo de los repuestos y crítica paralización del parque automotor”.
Golpe al bolsillo
De concretarse el aumento de pasaje en 100% se convertiría en el más significativo del último quinquenio, arrojaría la cifra de 1333% de incremento frente a un 565,5% de ajuste en el salario mínimo en el mismo período.
En este escenario, los ciudadanos que deban tomar al menos dos transportes para llegar a sus sitios de trabajo tendrían que destinar Bs. 3200 mensual al rubro transporte, lo que representa 27,6% del sueldo mínimo, por por lo que plantean ajustes en su presupuestos y no descartan un incremento al uso del Metro de Caracas, como medida paliativa. Esta representaría un opción más económica de movilización, con una tarifa 10 veces menor por cada desplazamiento (Bs. 4 por viaje).
(Hinterlaces)
