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La seguridad sigue siendo un tema importante en la agenda nacional. Tras una serie de hechos violentos terroríficos que impactaron la opinión pública, se recrudece la discusión sobre el gran poder que han conquistado los delincuentes en la vida del ciudadano común.

 

Un informe sobre Venezuela, realizado por Jane’s Information Group y publicado en el IHS Jane’s Intelligence Weekly este 22 de marzo, hace un análisis sobre el significado de estos hechos, el crecimiento de las “mega-bandas” y su influencia con respecto al Estado.

 

En este sentido, la firma británica es muy dura con respecto a las estrategias aplicadas, calificándolas como débiles y asegurando que las políticas de tolerancia solo han generado el reforzamiento de estos grupos delictivos y sus redes de influencia e interconexión.

 

“Las malas condiciones socioeconómicas y una respuesta débil del Gobierno han permitido el fortalecimiento de las bandas nacionales, lo que plantea un desafío directo a la autoridad del Estado en muchas áreas”, se lee en el informe titulado “Matanza masiva en los barrios pobres de Venezuela debido a un armamento mejorado y capacidad de las bandas para realizar ataques coordinados”.

 

Uno de los problemas principales que plantea esta nueva forma de organizarse por parte de los grupos delictivos, incluye desafíos más grandes a los grupos de seguridad del Estado que parecen no tener capacidad de respuesta ante ataques coordinados, en donde las mega-bandas pueden acumular hasta 150 efectivos.

 

“Esto plantea una amenaza masiva a las fuerzas de seguridad (que han sido objeto de robos para despojarlos de sus armas o de venganza) y seguridad privada (empresas de protección y diplomáticos), que no podrían soportar un ataque sorpresa por una banda fuertemente armada de 150 personas, con fusiles de asalto y granadas”, afirma Diego Moya-Ocampos, autor del informe.

 

Moya-Ocampos sostiene que las autoridades no han dado con el mecanismo idóneo para responder a los altos índices delictivos porque “no están abordando el origen de la delincuencia y la violencia”.

 

Pero el aumento del poder efectivo -del arsenal del hampa- es lo que más atemoriza al ciudadano común y el punto clave del informe, que destaca el exponencial crecimiento del poder de fuego de las mega-bandas. “La cuestión clave a destacar es el aumento de la capacidad de armamento que tienen las bandas locales que operan en la capital de Caracas y otras zonas urbanas en las regiones,”subraya Ocampo.

 

A pesar de que existan reservas con la fuente de este estudio, uno de los principales referentes en cálculos de riesgo-país y seguridad a nivel mundial, lo cierto es que varios datos resultan acoplarse de manera clara con la realidad actual y el poder conquistado por el hampa frente al Estado, un debate que pica y se extiende.

 

¿Tolerancia? ¿Militarización? Juzgue usted mismo.

 

(LaIguana.TV)