marisol-c.jpg

La artista visual Marisol Escobar, conocida en el medio plástico venezolano por sus ensamblajes en madera, inspirados por la escultura precolombina, y considerada una de las pioneras del Pop Art en Estados Unidos, falleció hoy a los 85 en el Presbyterian Hospital del bajo Manhattan. Padecía de Alzhéimer.

 

La información fue difundida por el artista Rolando Peña, quien se encuentra en Miami preparando una exposición para el Museo de Arte Contemporáneo de esa localidad.

 

“Con un profundo dolor les comunico que acaba de irse a otras latitudes la maravillosa artista-escultora Marisol (Marisol Escobar), la reina indiscutible del Arte Pop de NYC, musa de Andy Warhol, entre otros. La conocí en el año 1963, en una cena en Nueva York. Era una mujer de una belleza y elegancia muy particulares. No hablaba, observaba con unos ojos penetrantes, era la mirada de una niña sorprendida, eso me llamó la atención. En un momento se me acercó y me dijo: ‘Tú te pareces a mí, puedes ser mi hermano, dicho y hecho, desde ese maravilloso día fuimos hermanos, mantuvimos a través del tiempo una gran complicidad, respeto y admiración mutua. Mimí Trujillo, su ángel protector, me mantenía al tanto de la salud de Marisol. ‘Esta manaña’ –me dijo–, se nos fue Marisol’. Confieso que a pesar que ya sabíamos lo de su pronta partida, siento un profundo dolor de muy adentro, se fue un ser excepcional, la artista más importante del Arte Pop de Nueva York y del mundo”, escribió Peña en su perfil en Facebook.

 

Nacida en París, el 22 de mayo de 1930, María Sol Escobar (reconocida como venezolana), fue una de las pioneras del Pop Art en Norteamérica, y ahora es conocida como una de las grandes referencias de la escultura y el ensamblaje artístico.

 

Comenzó sus estudios de arte desde muy temprana edad. A los 16 años descubrió su pasión por las artes y viviendo en la ciudad de Los Ángeles estudió en el Otis Art Institute y en el Jepson Art Institute; en éste último tuvo como profesor al artista norteamericano Howard Warshaw. Más tarde se instaló en Francia para estudiar en la Ecole des Beaux Arts de París, pero debido a diferencias ideológicas, regresó a Estados Unidos en 1950, esta vez a Nueva York, para establecerse como estudiante del pintor Yasuo Kuniyoshi en el Art Students League.

 

Durante los próximos cuatro años, Marisol realizó diversos cursos en New School for Social Research, para luego pasar a las manos del expresionista abstracto Hans Hofmann en la ciudad de Massachusetts. Durante esos años de estudio, la artista venezolana se consagró como una expresionista abstracta, llegó a compartir con personalidades como Jackson Pollock y Willem de Kooning, pero en 1954 abandonó todo el amor que poseía por la pintura clásica y se entregó totalmente a la escultura folclórica precolombina, realizando así, en 1958, su primera exposición en la Galería de Leo Castelli en Manhattan.

 

La escultura precolombina fue el principio de los trabajos más importantes de Marisol, es decir, la base para que ella se consagrara como la artista que se conoce hoy. En la década de 1960 hizo una serie de exhibiciones exitosas, sobre todo en la llamada The art of assemblage, organizada por el MoMA y donde tuvo la oportunidad de exponer su trabajo From fance, al lado de artistas como Marcel Duchamp y Pablo Picasso.

 

Poco a poco sus obras fueron creciendo y madurando artísticamente. Comenzó a tomar los moldes de su mismo cuerpo para las esculturas que realizaba, de esta manera, les dio un toque único y característico a cada uno de sus trabajos, estando siempre presente en ellos. Por ejemplo, en La boda, su rostro aparece en las caras de los personajes. De esta manera, abrió paso a la escultura satírica de distintos personajes y situaciones. Incluía en sus piezas rostros de amigos, celebridades y líderes mundiales, logrando criticar la cultura y sociedad popular del consumo de aquel entonces.

 

Debido al gran éxito de su trabajo, Marisol se convirtió en la única mujer activa durante el auge de la corriente del Pop Art. Sus trabajos pasaron a ser los protagonistas del momento de la mano con Roy Lichtenstein y Andy Warhol (este último la incluyó en dos de sus películas: El beso y Trece hermosas jóvenes).

 

En general, sus obras se basaban en la unión de diferentes materiales como madera, pintura, fotografía y objetos de todo tipo, que juntos le daban forma a grandes trabajos artísticos. Gracias a sus trabajos, Marisol Escobar, es considerada como una de las artistas más influyentes del Siglo XX.

 

En 1996, el Museo de Arte de Contemporáneo de Caracas Sofía Ímber exhibió una retrospectiva de Marisol al reunir en sus salas obras de la artista pertenecientes a colecciones públicas y privadas del país. La escultora también llevó su trabajo a espacios públicos de la ciudad, como la escultura homenaje a Carlos Gardel colocada en Caño Amarillo.

 

Mimí Trujillo, quien estuvo al lado de la artista desde 1979, comentó desde Nueva York que Marisol Escobar pidió en su testamento que sus cenizas fueran esparcidas en Molokai, una de las islas de Hawái.

 

(El Universal)