Un arqueólogo griego que excavaba el lugar de nacimiento de Aristóteles en el norte de Grecia en la década de los 1990, dice que una estructura destruida que descubrió pudo haber sido la tumba del antiguo filósofo y maestro de Alejandro Magno.
Konstantinos Sismanidis reconoce que «no tiene prueba, sino sólo fuerte indicios» para respaldar su teoría, que presentó el jueves en una conferencia para conmemorar el aniversario 2.400 del nacimiento del filósofo.
Aristóteles (384-322 a.C.) era alumno de Platón y es uno de los pensadores más influyentes en la historia.
Sismanidis dijo que la estructura desenterrada en las ruinas de Estagira, a 70 kilómetros (43 millas) al este de Tesalónica, alguna vez fueron un monumento público en donde Aristóteles fue homenajeado tras su muerte. En el lugar no se encontraron restos humanos.
Sismanidis también citó fuentes medievales que indican que las cenizas de Aristóteles fueron enterradas en su pueblo natal.
(AP)
