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Frente a los recientes acontecimientos en Venezuela, desde la plataforma de Movimientos Sociales hacia el ALBA decimos a la derecha venezolana y al Departamento de Estado de los EEUU, a la ONU y a la OEA: Basta de intentos de golpe, basta de intentar romper con el orden democrático, basta con el empeño de echar por tierra la voluntad del pueblo venezolano, los pueblos en lucha no lo permitiremos.

 

En primer lugar decimos que de acuerdo a la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela el poder legislativo en Venezuela no tiene la competencia para destituir autoridades de los poderes: judicial, electoral y mucho menos al poder ejecutivo en la figura del Presidente Nicolás Maduro Moros elegido por la mayoría de la población. Por lo tanto, denunciamos que el resultado de la sesión de la Asamblea Nacional de ese país, ayer domingo 23 de octubre de 2016. Fue una declaración de golpe de estado parlamentario, violatoria de la ley y de la democracia.

 

Ante esto emplazamos a los pueblos del continente a defender por todos los medios necesarios el orden democrático en Venezuela. Y a los gobiernos de la región así como los organismos multilaterales: UNASUR, CELAC, ALBA TCP, MERCOSUR, OEA, ONU, a pronunciarse de inmediato condenando el intento de ruptura del orden democrático de un país que desde la constituyente de 1999 ha sido referente en consultas y procesos electorales de todas las autoridades y grandes decisiones, un país que además ha mantenido las metas del milenio para el desarrollo humano como referente de gestión, a pesar del asedio que mantienen el gobierno más poderoso del mundo y grupos trasnacionales financieros, alimentarios y mediáticos contra su población y su gobierno.

 

En segundo término queremos emplazar a todos los factores democráticos de este continente a sentar posición sobre lo que se ha vuelto una práctica recurrente de las burguesías nacionales y trasnacionales con la complicidad de muchos gobiernos: los golpes parlamentarios, que se han constituido en una “puerta trasera” para desconocer la voluntad electoral mayoritaria de nuestros pueblos. Así ocurrió en Paraguay con el gobierno de Fernando Lugo, luego en Honduras con el gobierno de Manuel Zelaya y hace poco más de un mes en Brasil con el gobierno de Dilma Rouseff. Se trata de parlamentos en regímenes no parlamentarios que violan el marco constitucional y legal de sus países, destituyendo presidentes electos por la mayoría de la población.

 

En última instancia hacemos un llamado al pueblo de Venezuela y a su Presidente Constitucional Nicolás Maduro Moros, que sepan que estamos con ustedes, que sabemos que están en la calle a diferencia de la derecha, que sabemos que al igual que nosotros y nosotras son pueblo trabajador, a diferencia de la derecha que es burguesía. Pero sobre todo, sepan que en todo el continente nos declaramos en campaña permanente en defensa de la democracia en Venezuela, de la Revolución Bolivariana que ha sido referente en la lucha por los derechos de los pueblos contra un modelo hegemónico capitalista profundamente anti-democrático que solo ha contribuido a aumentar la pobreza, la desigualdad, las guerras, la violencia y el saqueo indiscriminado de la naturaleza que ha traído consigo irreparables daños a nuestro ecosistema.

 

(www.albamovimientos.org)