En febrero de 2013 el actual Gobierno de México, dirigido por Henrique Peña Nieto, reconoció que durante el sexenio de Gobierno de Felipe Calderón fueron desaparecidas más de 26 mil 121 personas y más de 60 mil murieron, una cifra que supera con creces las cifras de la dictadura argentina.

 

Este macabro legado, incluso, fue denunciado por la agencia defensora de los derechos humanos Human Rights Watch (HRW) que asegura, según sus investigaciones, que estas muertes forman parte de los daños colaterales de la “lucha” de Calderón contra el narcotráfico.

 

Un informe presentado por HRW confirma que muchas de las desapariciones forzosas, que se registraron durante los seis años de Gobierno de Calderón, se produjeron con la acción conjunta de efectivos policiales y miembros de bandas delictivas.

 

Afirma José Manuel Vivancos, director de HRW que el Gobierno de Calderón condujo una “guerra a sangre y fuego, sin reglas y sin control en contra de los carteles”, violando derechos humanos fundamentales y, peor aún, negando esta situación. “Hay que hacer justicia para los familiares de los desaparecidos”, afirmó Vivancos al momento de hacer público el informe de su organización.

 

Vale destacar que estas monstruosas cifras fueron publicadas por la Secretaría de la Gobernación de México del Presidente Henrique Peña Nieto y comprende el periodo desde noviembre de 2006 hasta noviembre de 2012.

 

Sin embargo, la exdiputada María Corina Machado decidió invitar al expresidente de México, no para exponer en Venezuela su sangriento expediente tras el llamado a «Salida» que dejó más de 40 muertos y cientos de heridos, sino con las pretensiones de dar en el país lecciones de democracia y respeto a los DD.HH., cuando ni siquiera una agencia de derecha como HRW pudo tapar los crímenes de su Gobierno.   

 

(LaIguana.TV)

 

 

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