A medida que transcurren los días se conocen nuevos detalles sobre el caso de “Brunito”, cuyo nombre real es Santiago Giovani Allio Torres, de 27 años, quien mandó a matar a su padre, Bruno Allio Bonetto (59), hecho ocurrido el pasado viernes 24 de febrero en la ciudad de Maracaibo, estado Zulia.
Según información divulgada por diferentes medios de comunicación, se conoció que ya fueron capturados tres de los culpables del referido crimen, que ha conmocionado a la opinión pública.
Allio Torres junto a su amigo Adolfo Hernández Medina (23), contrataron a Daniel José Mondoy Barreto (18), y un adolescente, de 17 años, para cometer el atroz crimen. Ambos habitan en el barrio Cerros de Marín de la capital zuliana y a cada uno se les pagó un millón de bolívares.
A pesar de que cada uno de los ejecutantes del asesinato tenía claro cuál era su papel, las cosas no salieron como se esperaba. El plan elaborado por “Brunito” era fingir un robo. Sus cómplices esperarían a la víctima dentro de su camioneta Jeep Cherokee, negra, placa AC707RV, lo someterían con su propia arma, para luego trasladarlo hasta un paraje solitario y asesinarlo.
Sin embrago las cosas se salieron de control. Bruno Allio, al verse sometido por los delincuentes, aceleró su vehículo hasta estrellarse contra la cerca de una casa ubicada frente al conjunto residencial en el que habitaba, por lo que a los sicarios no les quedó otra que matar a la víctima en plena vía pública, disparar al aire para poder escapar y correr unas cuantas cuadras hasta el lugar donde estaría Allio Torres y obligarlo a montarlos en la camioneta F-150 roja, que su propio padre le había regalado el día anterior.
Todo quedó grabado en las cámaras de seguridad de las residencias aledañas, por lo que los investigadores obtuvieron los detalles del suceso.
Se pudo conocer además que el propio “Brunito” fue quien facilitó a los delincuentes el arma, una Beretta calibre 9 milímetros, con la que fue asesinado el empresario, y permitió el acceso de éstos al vehículo de su padre para que lo sometieran con mayor facilidad.
El detalle que delató al joven fue la frialdad y el desinterés que mostró al ver el cadáver de su progenitor, hecho que llamó la atención de los detectives. Las constantes contradicciones en las que cayó Allio Torres durante el interrogatorio y el nerviosismo que evidenciaba, fue lo que despejó las dudas de los policías.
Los detenidos hasta los momentos son, además de “Brunito”, su amigo Hernández y Mondoy Barreto, uno de los sicarios. Permanece en fuga el adolescente.
El motivo del atroz crimen fue la herencia del empresario, quien en pocos días se casaría con su pareja, una fiscal del Ministerio Público. El temor de su hijo a no ser el único heredero de su fortuna lo llevó a planificar el asesinato.
(LaIguana.TV)
