Un grupo de exfuncionarios y familiares del exministro de Energía y Petróleo, Rafael Ramírez Carreño, se había apoderado de unos 12.000 millones de dólares de la estatal Petróleos de Venezuela, según investigaciones realizadas por el Ministerio Público de Venezuela asociadas a tres tramas de corrupción.
«Si sumamos los casi 5.000 millones de dólares de la Operación Atlantic, más los 4.200 a los que estoy haciendo referencia con este caso de Andorra, más el daño causado al patrimonio nacional con el tema del buque chatarra Petrosaudí, (…), suman un daño patrimonial al país para que este grupo se enriqueciese como lo hizo, con un aproximado de 12.000 millones de dólares», detalló este viernes en una rueda de prensa el fiscal general, Tarek William Saab.
En relación con el llamado caso de blanqueo de capitales en el principado de Andorra, puntualizó que entre octubre de 2011 y noviembre de 2012, un grupo de exfuncionarios encabezados por Diego Salazar –primo hermano de Ramírez– habría blanqueado capitales por más de 1.347 millones de euros.
Indicó, asimismo, que por esta trama en particular está detenido Salazar Carreño, se han emitido órdenes de aprehensión y solicitudes de alerta roja de Interpol e indicó que otras personas están siendo investigadas «bajo medidas cautelares».
Este viernes, Saab informó que el Estado venezolano adelanta nuevas solicitudes de extradición contra Ramírez y contra el exviceministro de Energía Nervis Villalobos, por su aparente implicación directa en al menos tres megaoperaciones de corrupción.
Sobre Ramírez pesa otra orden de extradición relacionada con el «buque fantasma» Petrosaudí, pero el gobierno italiano se ha negado a cumplir con la solicitud de Venezuela alegando ausencia de garantías jurídicas.
Por su lado, Villalobos fue detenido en España por lavado de activos. Allí se le sigue un proceso judicial que inició con posterioridad del venezolano y también es requerido desde 2017 por una corte estadounidense por una trama de sobornos en Pdvsa.
(LaIguana.TV)