“Las acciones de Hamas le han venido a Benjamin Netanyahu como anillo al dedo, pues le permiten escapar de una severa crisis política y avanzar hacia su objetivo final de alcanzar la ‘solución final’ contra Palestina”, afirmó Miguel Ángel Pérez Pirela, al estudiar el tema en su programa Desde donde sea.
Al iniciar el análisis, presentó el Iguanazo, caricatura de Iván Lira, en la que se observa una mano empuñando un arma larga. La leyenda dice: “La lucha armada es el camino que los opresores les imponen a los pueblos oprimidos. ¡Viva Palestina libre!”.
Luego mostró un video sobre el ataque desde Gaza por tierra, mar y aire de Hamás contra territorios controlados por Israel, en el que se explica el contexto de más de 70 años de imposición violenta de Estado sionista sobre los palestinos y el doble rasero con el que la llamada “comunidad internacional” aborda esas agresiones frente a las sufridas por los colonos israelíes.
“Los países europeos, que hasta intentan derrocar gobiernos y bombardean países con el argumento de defender la libertad de expresión, imponen censura a sus ciudadanos, que ni siquiera pueden salir a protestar a las calles con una bandera palestina. Si usted expresa su punto de vista a favor de Palestina en París o Londres, va preso… ¡Qué democracia es esa, qué gran hipocresía! Están cayendo muchísimas caretas en el mundo”, dijo Pérez Pirela.
“Y eso lo hacen los gobiernos de los muy democráticos países europeos para apoyar a un régimen de extrema derecha como el de Netanyahu, porque es falso que el gobierno actual de Israel represente a los judíos asesinados en los años 40 en Europa. Por el contrario, el pueblo israelí ha salido a protestar en masa en los últimos meses en contra de una reforma judicial que pretende coartar derechos fundamentales de la gente. El ataque de Hamas le viene como anillo al dedo porque estaba colgando de un hilo y ahora tiene la oportunidad de cumplir lo que siempre ha prometido: la solución final para Palestina, su aniquilación, es decir, lo mismo que hicieron los nazis contra los judíos”.
Añadió que en casi todos los programas periodísticos europeos y estadounidenses, los entrevistados son abordados con una primera pregunta: “¿Usted condena los ataques de Hamas contra Israel?”. Si alguien no parte de esa condena, es calificado como simpatizante del terrorismo. Es un chantaje de la mediática internacional, denunció.
Análisis de intelectuales israelíes
Dedicó un segmento del programa a leer los análisis de intelectuales israelíes, críticos con el genocido palestino. Uno de ellos es el escritor Assaf Gavron, quien dice que Netanyahu llevó la presión hasta un punto tal que explotó, pensando en que quebraría la resistencia palestina, pero no logró ese objetivo.
También citó extensamente al periodista israelí Gideon Levy, que escribe artículos de opinión y una columna semanal para el periódico Haaretz que a menudo se centran en la ocupación israelí de los territorios palestinos. Es uno de los más notables periodistas en la izquierda israelí. Para los sectores más reaccionarios de ese país Levy es estigmatizado como un “propagandista de Hamas”. En 1974, Levy fue reclutado por las Fuerzas de Defensa de Israel, donde se desempeñó como reportero para su radio militar. Entre 1978 y 1982 trabajó como ayudante de Shimon Peres, entonces líder del partido laborista israelí. En 1982 comenzó a escribir para Haaretz.
Levy critica lo que él ve como una “ceguera moral” de la sociedad israelí a los efectos de sus actos de guerra y la ocupación. Escribió que la construcción de asentamientos en tierra palestina privada como “la empresa más criminal de la historia de Israel”. Se opuso a la guerra de 2006 entre Israel y el Líbano, y la opinión de que las víctimas civiles son inevitables. En el 2007, dijo que la difícil situación de los palestinos en la franja de Gaza entonces bajo bloqueo, le hizo avergonzarse de ser israelí.
Levy apoya la retirada unilateral de los territorios palestinos ocupados, sin concesiones. “A Israel no se le pide dar nada a los palestinos. Sólo se le pide que permita que éstos vuelvan a su tierra robada y recuperar su pisoteada dignidad, junto con sus derechos humanos fundamentales y de la humanidad”.
Levy escribió que la guerra de Gaza fue una fallida campaña y sus objetivos no se alcanzaron. “La conclusión es que Israel es un país violento y peligroso, desprovisto de todas las restricciones y que descaradamente hace caso omiso de las resoluciones de las Naciones Unidas del Consejo de Seguridad, al que le importa un comino el derecho internacional”, escribió en un editorial.
Luego leyó varios párrafos del trabajo de Levy:
“Detrás de todo esto está la arrogancia israelí. Pensamos que tenemos permiso para hacer cualquier cosa y suponer que nunca pagaremos ni seremos castigados. Y pensamos que seguiremos y nada nos interrumpirá. Arrestaremos, mataremos, abusaremos, despojaremos, protegeremos a los colonos y sus pogromos, iremos a la tumba de José, a la tumba de Ot’niel, al altar de Josué, todo en los territorios palestinos, y por supuesto al Monte del Templo —más de 5.000 judíos sólo en Sucot—. Dispararemos a inocentes, les arrancaremos los ojos y les destrozaremos la cara, los expulsaremos, expropiaremos, robaremos, los secuestraremos de sus camas, los someteremos a limpieza étnica y, por supuesto, continuaremos con el increíble asedio a Gaza. Y supondremos que todo seguirá como si nada”.
“Pensamos que con la construcción una superbarrera alrededor de la Franja de Gaza, cuyo muro subterráneo costó tres mil millones de shekels, con eso ya estábamos a salvo. Confiamos en que nos avisarían a tiempo los genios del 8200 (Unidad de Escuchas de inteligencia militar) y los miembros del Shin Bet, que lo saben todo. Pensamos en moveríamos medio ejército de las cercanías de Gaza a Hawara sólo para proteger las locas travesuras de Zvi Sukkot y los colonos, y todo saldría bien, tanto en Hawara como en Erez. Resulta que cuando existe una gran motivación el obstáculo más sofisticado y costoso del mundo puede ser atravesado hasta por una simple excavadora y con relativa facilidad. Se puede cruzar ese altanero muro con bicicletas y scooters, a pesar de todos los miles de millones invertidos en él y a pesar de todos los expertos y con sus contratistas enriqueciéndose”.
“Pensamos que seguiríamos acosando a Gaza, arrojándole algunas migajas de bondad en forma de algunos miles de permisos de trabajo en Israel —una gota en el océano, y además siempre están condicionados a un ‘correcto comportamiento’— y aun así supusimos que los seguiríamos manteniendo como en una prisión”.
“Pensamos que haciendo las paces con Arabia Saudita y los Emiratos, los palestinos serían olvidados, hasta ser borrados, como les gustaría a muchos israelíes. Seguiríamos reteniendo a miles de prisioneros palestinos, incluidos prisioneros sin juicio, la mayoría de ellos prisioneros políticos, y aun así no aceptaríamos discutir su liberación, incluso después de décadas en prisión. Les diríamos que sólo por la fuerza sus prisioneros verán la libertad. Pensamos que seguiríamos rechazando con soberbia cualquier intento de solución política, simplemente porque no nos conviene hacerlo, y pensamos que seguramente todo seguiría así para siempre”.
“Una vez más se demuestra que no es así. Varios cientos de militantes palestinos atravesaron el alambrado e invadieron Israel de una manera que ningún israelí imaginó que que pudieran. Unos cientos de militantes palestinos demostraron que es imposible encarcelar a dos millones de personas para siempre sin que ello suponga un precio cruel. Así como ayer la humeante y anticuada excavadora palestina derribó la valla, la más sofisticada de todas las vallas, también desgarró el manto de arrogancia de Israel. Y también destrozó la idea de que basta con atacar y desmantelar Gaza con drones suicidas y venderlos a medio mundo para mantener la seguridad”.
“Israel vio ayer imágenes que nunca había visto antes: vehículos militares palestinos patrullando la ciudad, ciclistas de Gaza entrando por sus puertas. Estas imágenes deben rasgar el velo de la arrogancia. Los palestinos de Gaza decidieron que están dispuestos a pagar cualquier precio por una chispa de libertad. Pero… ¿tiene esto algún potencial? No. ¿Israel aprenderá la lección? No”.
“Ayer ya se hablaba de borrar barrios enteros de la ciudad de Gaza, de ocupar la Franja de Gaza y de castigar a Gaza ‘como nunca antes se había castigado’. Pero Gaza no ha dejado de ser castigada por Israel desde 1948, siquiera por un momento. Más de siete décadas de abusos, y otra vez, lo peor está por venir. Las amenazas de ‘aplanar Gaza’0 sólo prueban una cosa: no hemos aprendido nada. La arrogancia llegó para quedarse, incluso después de que Israel, otra vez, paga un alto precio”.
“Benjamín Netanyahu tiene una gran responsabilidad por lo sucedido y debe pagar los costos, pero la cuestión no comenzó con él y no terminará después de su partida. Ahora debemos llorar amargamente por las víctimas israelíes; pero también tenemos que llorar por Gaza. Gaza, la mayor parte de sus residentes son refugiados creados por Israel. Gaza, la que nunca conoció un solo día de libertad”.
Tras referir estos puntos de vista de israelíes no alineados con la política genocida, Pérez Pirela señaló que es una vergüenza que se esté cometiendo una matanza, transmitida y en vivo, de la que se culpa a los palestinos, es decir, a las víctimas.
Ofreció un segundo Iguanazo sobre el tema en el que aparece un hombre apuntado por el cañón de un tanque de guerra de apariencia muy poderosa. Desde dentro del vehículo, una voz dice: “Yo tengo derecho a defenderme”, y el hombre pregunta: “…Pero ¿yo no?”.
Presentó una nota de laiguana.tv titulada: Abbás: pueblo palestino tiene el derecho de autodefensa contra los ataques israelíes.
El presidente palestino, Mahmoud Abbás, ha reafirmado este sábado “el derecho del pueblo palestino a defenderse contra el terrorismo de los colonos y las fuerzas de ocupación”.
En una reunión de emergencia que mantuvo con funcionarios civiles y de la seguridad de palestina, el mandatario ha ordenado que “se proporcione todo lo necesario para fortalecer la firmeza” de los palestinos frente a los “crímenes cometidos por la ocupación israelí y las bandas de colonos”.
Cifras
Mostró otra nota de laiguana.tv titulada: Ataques israelíes: más de 123 mil desplazados en gaza
Indica el texto que la oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) informó este lunes que 123.538 palestinos se han visto obligados a desplazarse de la Franja de Gaza ante los ataques del ejército de ocupación israelí.
El ente de las Naciones Unidas apuntó que se han desplazado más de 17.500 familias mientras más de 73.000 personas están alojadas en escuelas, muchas de las cuales fueron declaradas como refugios de emergencia.
A su vez, se reportan más de 500 muertos por los bombardeos israelíes contra zonas civiles de la Franja de Gaza, entretanto, se contabilizan 2.800 heridos, según dio a conocer esta jornada el Ministerio de Salud palestino.
La guerra mediática
Volvió sobre el tema de la parte mediática de este conflicto, presentando otra caricatura de Iván Lira, en la que un soldado con casco y chaleco antibalas y con un cartel de “Press” (Prensa) en el pecho, lleva en sus manos una cámara de televisión, empuñada como si fuera un arma. La leyenda dice: “Los medios occidentales son un ejército para la guerra informativa”.
Para ahondar en esa arista del tema, apeló a una nota de laiguana.tv , titulada: Biden se unió al fake de los bebés israelíes decapitados por Hamás y la propia Casa Blanca lo desmintió.
En el texto de la noticia, se informa que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, aseguró que estaba al tanto de niños que fueron decapitados en días recientes por supuestos miembros del grupo palestino Hamás. Sin embargo, un portavoz de la Casa Blanca aclaró después que en realidad el mandatario no tenía prueba alguna y que solo se refería a los informes que vio en medios israelíes.
“Llevo haciendo esto mucho tiempo. Realmente nunca pensé que vería, que confirmaría imágenes de terroristas decapitando niños”, dijo Biden en un encuentro con la comunidad judía de Estados Unidos en Washington DC, este 11 de octubre.
El presidente estadounidense, además, calificó como una “campaña de pura crueldad” las presuntas atrocidades cometidas por Hamás en contra de los menores y llamó a que el pueblo estadounidense se enterara de todo lo que estaba sucediendo.
Horas después de su declaración —que fue replicada por la mayor parte de la prensa occidental— un portavoz de la Casa Blanca aclaró que ni Biden ni ningún funcionario del gobierno había visto o confirmado la existencia de fotografías o videos de menores decapitados en Israel, según reportaron medios como The Telegraph, EFE, DW y The Times of Israel. El vocero aclaró que el mandatario solo se refería con sus comentarios a los reportes que circulan en algunos medios.
La aclaración surge después de que se hiciera viral un informe de la reportera israelí del canal i24news, Nicole Zedeck, desde el kibutz de Kfar Aza, en el sur de Israel, en el que se informaba de que soldados israelíes habían encontrado dichas escenas con niños masacrados. Zedeck se encontraba entre los periodistas invitados a inspeccionar las secuelas de la infiltración de combatientes de Hamás en la nación gobernada por Benjamin Netanyahu.
La noticia no verificada de que miembros de Hamás habrían decapitado a 40 bebés israelíes se propagó rápidamente por las redes sociales y fue compartida a pesar de no estar confirmada por ninguna autoridad israelí.
Para poner en contexto histórico el “error” de Biden, Pérez Pirela presentó en dos ocasiones un video de una intervención de un joven Joe Biden ante el Senado, en la que dice que «si no existiera Israel, Estados Unidos tendría que inventarlo».
Colapso del sector salud
El moderador señaló que mientras se producen estos fake news, respaldados incluso por el presidente de Estados Unidos, lo que sí es noticia plenamente confirmada es el inminente colapso del sistema de salud en Gaza, causado por el bloque israelí contra la zona.
La ministra palestina de Salud, Mai Al-Kaila, advirtió hoy sobre el inminente colapso del sector en la Franja de Gaza como consecuencia de la grave escasez de medicamentos, insumos y bolsas de sangre por el bloqueo israelí.
El gran número de heridos supera la capacidad de los hospitales en ese enclave costero, alertó la funcionaria en un comunicado, tras seis días de bombardeos de aviones israelíes.
Renuevo mi llamado a las organizaciones sanitarias internacionales, al Comité Internacional de la Cruz Roja y a todos los países para que intervengan de manera inmediata y urgente a fin de llevar medicamentos y suministros, especialmente para quirófanos, departamentos de emergencia y cuidados intensivos, señaló.
Desde el inicio de las hostilidades el sábado pasado con la incursión de Hamás por tierra, mar y aire junto con el lanzamiento de miles de cohetes, más de 2.000 personas de ambos lados han perdido la vida, mientras que más de 7.000 han resultado heridas.
Reportes de la situación en Gaza evidencian el genocidio que comete el ejército israelí contra la población palestina. Según los informes, al mediodía de este miércoles, 11 de octubre, dejó de funcionar la única planta eléctrica que surtía a la Franja, lo cual afectaría directamente a los servicios médicos, donde se atiende a unos 5.000 heridos.
“Nuestra capacidad está al límite y solo podemos intentar mantener las vidas de los heridos”, dijo a efe el doctor Medhat Abás, portavoz del complejo médico al Shifa, el hospital más grande de la ciudad de Gaza.
El genocidio sin rubor
El presentador de Desde donde sea expresó que para quien tenga alguna duda de que está en marcha un genocidio, debe revisar las declaraciones de Netanyahu, afirmando que “cada miembro de Hamás es un hombre muerto”.
Leyó la nota al respecto: El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, ha declarado la noche de este miércoles en un mensaje a la nación que cada miembro del movimiento radical palestino Hamás es “un hombre muerto”.
Netanyahu volvió a comparar los ataques de Hamás con las prácticas utilizadas por los terroristas del estado islámico (EI), al tiempo que anunció formalmente la creación de un gobierno de unidad nacional junto con el líder de la coalición opositora, Benny Gantz.
“Dejamos de lado cualquier otra consideración por los ciudadanos de Israel”, remarcó el jefe del Ejecutivo que antes del actual conflicto enfrentaba protestas multitudinarias que se prolongaron durante meses en contra de su reforma judicial.
Por su parte, Gantz subrayó que su intervención junto con sus rivales políticos “envía un mensaje claro a los adversarios y ciudadanos israelíes”. “Igual que la gente de izquierda y derecha, de la ciudad y del pueblo, sale a luchar, las decisiones del gobierno también las tomarán personas de distintos bandos. Ahora, todos somos un solo bando: el bando del pueblo de Israel», agregó el líder opositor.
Mientras, el ministro de Defensa de la nación hebrea, Yoav Gallant, tildó la incursión de Hamás del “peor ataque terrorista que ha visto el mundo”. “Lo que ocurrió no ha pasado al pueblo judío desde 1945”, aseveró. En este contexto, prometió “eliminar” al movimiento islamista palestino. “Hamás, el Daesh [Estado Islámico] de Gaza será borrado de la faz de la tierra”, prometió.
El pasado martes 10, Gallant, anunciaba la brutalidad con la que actuarían en respuesta a los ataques perpetrados por las milicias del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás). “Ordené un asedio total sobre la Franja de Gaza. No habrá electricidad ni alimentos ni gas, todo está cerrado. Estamos luchando contra animales humanos y actuamos en consecuencia”, anunció.
Ante estas palabras del ministro, que es un auténtico energúmeno, el jefe de la diplomacia de la Unión Europea, Josep Borrell ha dicho que esta acción de Israel constituye un “castigo colectivo”, es decir, “un crimen de guerra”.
“Si un guerrerista como Borrell se atreva a hacer estas afirmaciones, hay que calcular la gravedad del genocidio que se está cometiendo”, dijo Pérez Pirela.
“El genocidio de España, que hoy 12 de octubre se conmemora, fue el más grande de la historia porque los españoles no querían considerar a los habitantes originarios de América como seres humanos. Durante años aseguraron que eran animales porque no tenían alma. Pues bien, en pleno siglo XXI, en este conflicto del Medio Oriente, el Estado sionista usa esos mismos argumentos para aniquilar a los palestinos y despojarlos de sus tierras”.
“Estamos ante uno de los momentos más aciagos del género humano. Antes a los genocidas se les llamaba genocidas, pero ahora se les llama víctimas y a quienes sufren sus ataques se les llama terroristas. Estamos viendo la aniquilación sistemática de una población a la que se le considera culpable por existir y que paga las consecuencias del colonialismo europeo y del enorme poder del lobby sionista en Estados Unidos”, concluyó.
(LaIguana.TV)