La reunión cuenta con el apoyo de la Comunidad de Estados Latinoamericanos (Celac), de la Comunidad del Caribe (Caricom), los cuales previamente remitieron un comunicado a ambos gobernantes, en el que manifestaron su interés para acordar la reunión, una iniciativa que resulta ante “la necesidad urgente de reducir la escalada del conflicto e instituir un diálogo apropiado, cara a cara».

El pasado 9 de este mes, el mandatario venezolano conversó con su par de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva; el titular de la Celac, Ralph Gonsalves, y con el secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres y se planteó la cita. 

Caracas aceptó el compromiso y ratificó el carácter legítimo y pacífico de su reclamación apegada al Acuerdo de Ginebra de 1966 y mantiene el no reconocimiento a la jurisdicción de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) para solucionar la disputa. 

En este contexto, Maduro dirigió una misiva a Gonsalves con fecha 11 de diciembre de 2023, en la que declaró sus aspiraciones para que el encuentro sea “el punto de partida hacia el retorno de las negociaciones directas entre ambos países”.

Por su parte, el mandatario guayanés a través de un comunicado accedió a la invitación de Goncalves, quien fungirá como anfitrión del encuentro y Lula Da Silva de mediador.

 

Asimismo, enfatizó que no renunciará a su decisión en cuanto a asistir a la CIJ para que este organismo determine un fallo.