De acuerdo con el CEO de Gear Capital Partners, empresa de asesoramiento macroeconómico, político y de reestructuración de deuda con sede en Nueva York, Jorge Piedrahita, «no hay una efectiva posibilidad de que se restablezcan las sanciones que perjudicaban las operaciones con bonos de deuda venezolana».
El analista financiero explicó durante una entrevista con el portal Banca y Negocios que “el consenso generalizado es que las restricciones de ‘trading’ no tuvieron ningún efecto sobre la administración de Nicolás Maduro y castigaron a los inversores estadounidenses y europeos, con precios deprimidos”.
Indicó que tras varias reuniones entre los colaboradores de mercado y el Departamento del Tesoro de EEUU se consiguió aclarar que “Non-US Persons (personas no estadounidenses) podían comprar y vender dichos bonos siempre que la transacción no involucra dinero adicional para el gobierno de Maduro”.
Piedrahita señaló que se tendió un mercado “offshore” para los bonos de deuda venezolana “con un nivel de liquidez que era una fracción de la que había antes de las sanciones”, citó el medio.
Por ende, un conjunto significativo de inversionistas institucionales norteamericanos y europeos comenzaron, principalmente a partir del 2021 y frente a la Administración de Joe Biden, “una fuerte actividad de lobby para eliminar las restricciones al trading de los bonos y deuda”.
Conjuntamente y bajo un enérgico grupo de presión del área petrolera, y en específico de Chevron, al término de 2022 se dio el paso a un proceso de flexibilización a través del permiso de la Licencia 41, la cual llevó a un incremento de la producción de crudo “que beneficia a Venezuela y un repago de ciertas deudas que PDVSA mantenía con Chevron”, concluyó el especialista.
