La estadounidense Serena Williams, que hoy perdió en Roland Garros su sexta final de un Grand Slam, aseguró que su rival, la española Garbiñe Muguruza, «tiene un futuro brillante por delante».
Visiblemente afectada, la menor de las Williams compareció sobria ante los medios y no le puso ninguna excusa a su derrota, ni los problemas de los aductores ni el cansancio acumulado por la acumulación de partidos ligados a la lluvia.