El domingo 2 de octubre, la marabina Greydis Oriana Reyes González, de 18 años, murió en el hospital Rosario Pumarejo de López de Valledupar, Colombia, tras recibir tres puñaladas en el tórax y pierna izquierda.

Reyes, quien tenía quince días en Colombia, fue atacada por la expareja sentimental del hombre con quien vivía desde su llegada a Valledupar.

El hecho ocurrió frente a la casa donde estaba hospedada desde que llegó a esa ciudad, en la carrera 27 con calle 34 del barrio El Prado, donde ese domingo una mujer la llamó y Greydis salió a hablar con ella.

“Yo estaba en la cocina lavando la loza y yo la dejé a ella con dos muchachos afuera hablando, cuando escucho son los gritos y al salir ya la veo en el suelo llorando, del susto no me dieron los pies para coger a la mujer que la apuñaló”, relató Leydis Tirado, amiga de Greydis.

“Al parecer como que la cogió descuidada porque cuando yo estaba dentro solo escuché los gritos, al salir vi que iba corriendo con una navaja en la mano”, declaró.

A Greydis la trasladaron a un hospital, donde falleció a pesar del esfuerzo de los médicos.

La agresora, identificada como Greys Esther Acosta Pérez, de 29 años y madre de un niño de 8 años, se entregó a la policía colombiana el día lunes 3 de octubre, y aceptó los cargos imputados por la Fiscalía en el delito de homicidio simple. 

La incapacidad de manejar la frustración, y en un acto de intolerancia apuñalar a Reyes González, fueron motivos para que el juez profiriera una medida de aseguramiento en un centro carcelario contra Acosta Pérez.

La madre de Greydis, Doris González, llegó ese mismo día a Valledupar para reclamar el cuerpo de su hija y llevarla a Maracaibo, donde le dará sepultura.

“Me enteré ayer (lunes), yo venía de Maracaibo con esperanza de conseguirla viva y resulta que la consigo muerta, pero me llevo un poco de alegría por dentro porque a esa mujer la capturaron y lo que quiero es que no salga nunca de la cárcel porque ella no mató a ningún animal, mató a una niña de 18 años; alegre, decente, humilde, que vino a Colombia a pasar vacaciones, a conocer porque le dijeron que aquí todo era bonito, pero lastimosamente me llevo en ataúd a mi hija”, dijo la afligida madre.

(LaIguana.TV)