Una línea ferroviaria que conecta Long Island con la ciudad de Nueva York seguía hoy suspendida después de que un tren se descarrilara en la noche del sábado y una treintena de personas resultaran heridas, según informaron las autoridades de Estados Unidos.
El gobernador del estado de Nueva York, Andrew Cuomo, se trasladó hoy hasta el lugar del accidente, en la localidad de New Hyde Park, para visitar a los heridos, cuatro de los cuales continúan en estado grave y permanecen ingresados en el hospital.
(EFE)