El ministro de Asuntos Exteriores de Irán llama “terrorista” al presidente de EE.UU., Donald Trump, por su “terrorismo económico” contra el pueblo iraní.
El canciller iraní, Mohamad Yavad Zarif, ha rechazado este viernes en Islamabad (capital paquistaní) insultos proferidos la víspera por el mandatario contra Irán, al volver a llamar “nación de terrorismo” al pueblo persa y tachar al país persa de “jugador muy peligroso”. “El único que merece el apodo de ‘terrorista’ es el propio Trump”, ha dicho el jefe de la Diplomacia iraní.
“Él le ha declarado una guerra económica al pueblo iraní, y eso es terrorismo, un esfuerzo destinado a imponer una opinión política mediante presiones económicas e impidiendo la venta de comida, medicamentos y materias primas, en contra de lo dictaminado por la Corte Internacional de Justicia (CIJ)”, ha denunciado Zarif en declaraciones a la prensa.
El mundo entero, ha resaltado el máximo diplomático persa, reconoce el papel clave que ha desempeñado la República Islámica en la lucha antiterrorismo en el oeste de Asia, en especial en Siria e Irak.
Trump nunca verá el final de Irán
Zarif, que llegó el jueves a la capital de Paquistán para una visita oficial, ha cuestionado además un reciente tuit en el que Trump intensificaba su retórica sobre Irán advirtiendo de que una guerra con EE.UU. “sería el fin oficial” del país asiático.
Trump “nunca verá el final de Irán y su civilización milenaria”, mientras que Irán sí verá el del magnate neoyorquino y su Administración, ha respondido al tuit el ministro, a cuyo juicio el republicano ha demostrado con su retórica belicista que “no conoce la historia de Irán ni a su pueblo”.
Esa retorica belicista contra Teherán ha elevado la tensión en el oeste de Asia en las últimas semanas. Las autoridades persas han recalcado a menudo el rechazo de Irán a cualquier guerra con EE.UU., pero han advertido de que si Washington sigue haciendo que la tensión suba habrá “consecuencias dolorosas”.
Por su parte, las Fuerzas Armadas iraníes han desestimado las amenazas estadounidenses, por considerarlas una táctica de “guerra psicológica”, y han asegurado que Washington no se atreverá a entrar en guerra directa con Irán, algo que reconocen los líderes estadounidenses.
(HispanTV)
