El ex «embajador» de Juan Guaidó en Colombia, apartado de ese «cargo» esta semana, denunció que su ex jefe así como Leopoldo López —prófugo de la justicia venezolana— tienen en sus manos «el informe de auditoría» sobre el escandaloso caso por «el uso irregular» de dinero en Cúcuta, razón que los obliga a «decir qué pasó» con «la ayuda humanitaria».

 

«Están en deuda con el país, deben decir qué pasó en Cúcuta con la llegada de la ayuda humanitaria, aunque no es culpa de Guaidó», aseguró Calderón, quien ofreció una rueda de prensa este viernes.

 

Reseñado por varios medios, Calderón Berti negó estar relacionado con el robo millonario ocurrido en Cúcuta por el equipo de confianza de Guaidó, así como los demás hechos que guardan relación con prostitución, drogas, narcotráfico, paramilitarismo, entre otros delitos graves en los que terminó asesinado Carlos Salinas, asistente de Freddy Superlano, luego de contratar a dos prostitutas y abusar de estupefacientes.

 

Calderón también indicó que no tiene conocimiento «sobre el uso irregular de los activos del gobierno interino de Juan Guaidó». En ese sentido, resaltó que las investigaciones que adelantó sobre lo ocurrido en la ciudad fronteriza con Venezuela se evidenció que «en los documentos habían facturaciones ficticias», hecho que lo motivó «a realizar una auditoría en Caracas».

 

«El informe de auditoría se lo mandé a Juan Guaidó y a Leopoldo López. No tuve nada que ver con la filtración de la información», indicó.

 

Calderón también dio a entender que Guaidó se está reuniendo «a espaldas» con el Gobierno venezolano.

 

«No hay que decirle a la gente que estemos en la calle, tampoco reunirse a espaldas con el régimen», acotó.