Este sábado, durante la primera plenaria de la VII Cumbre de las Américas, que se realiza en el Centro de Convenciones Atlapa, la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, al igual que el presidente de Ecuador, Rafael Correa, rechazaron las sanciones de Estados Unidos contra Venezuela, pues “ese país hermano solo pide moderación, respeto a la independencia”. Y aplaudió que la unión de naciones suraméricanas (Unasur) trabaja para buscar el diálogo en la nación bolivariana.
Por otra parte, Rousseff señaló que aunque América Latina y el Caribe tienen ahora menos pobreza, aún se tiene un largo camino y muchos retos por cumplir. “Combatir la desigualdad en todas sus manifestaciones es algo muy importante”, fueron sus palabras y afirmó que los modelos de los países pueden ser diferente, pero deben tenerse metas comunes.
Asimismo, la presidenta brasileña se refirió además a los diálogos entre el gobierno colombiano y las Fuerzas Armadas Revolucionarios de Colombia (FARC), manifestando que espera conmemorar en breve la paz en en ese país.
Cabe recordar, que en días previos, Rousseff dio unas declaraciones a un medio de comunicación internacional que causaron polémica y diversas agencias noticiosas hicieron eco interpretando que la presidenta pedía que liberaran a los «presos políticos», siendo cierto que ella se refirió claramente a que si alguna persona cometió un crimen contra el Estado es necesario que cumpla las setencias de los órganos judiciales competentes.
(LaIguana.TV)