Analizando la impronta del 12 de octubre sobre los pueblos de América, Miguel Ángel Pérez Pirela señaló, en su programa Desde Donde Sea, que en diversas investigaciones se ha estimado que desde la llegada de los conquistadores a nuestros territorios, perdieron la vida aproximadamente 56 millones de indígenas, lo que constituye un genocidio del que poco se habla, acaso el más grande de la historia.
«Desde esa fecha hasta un siglo después, entre el 75 y el 80 % de la población indígena que existía en el momento, perdió la vida. Una parte murió simplemente masacrada, otros debido a tratos crueles y otros debido a enfermedades importadas desde Europa, para las que los pueblos originarios no tenían inmunidad», explicó el experto.
Por otro lado, el intelectual uruguayo Eduardo Galeano, aludiendo al saqueo de riquezas al que fueron sometidos nuestros ancestros, sostuvo en Las venas abiertas de América Latina que «se pudo construir un puente desde Potosí hasta España» y «también se pudo construir un puente de huesos, con los restos de quienes perecieron en esos siglos de dominación europea».
Para Luis Britto García, la conquista de América por parte de Europa, «se trató de una expedición de saqueo y exterminio. Nuestros aborígenes eran igualitarios, no había explotadores. El Nuevo Mundo le planteó al Viejo Mundo toda una cantidad de interrogantes: Europa se descubrió a sí misma al descubrir América».
Estas serían las razones por las cuales, según Miguel Ángel Pérez Pirela, jóvenes activistas de izquierda se han acometido al derribo sistemático de estatuas de Cristóbal Colón y otros conquistadores y colonos en el continente, incluso en los Estados Unidos.
(LaIguana.TV)