El mandatario brasileño, Jair Bolsonaro, volvió al centro de la polémica tras proferir declaraciones homofóbicas durante un discurso en el que cuestionó el interés que despierta la pandemia, pese a que su país registra casi 5,7 millones de casos de COVID-19 confirmados y se ubica en la tercera posición a nivel mundial y computa 163.368 decesos por esa causa, según el portal especializado Worldometer.

«Todo ahora es pandemia, hay que acabar con eso. Lamento los muertos, los lamento», dijo durante una rueda de prensa desde el Palacio de Panalto, en Brasilia.

Seguidamente manifestó que «todos nos vamos a morir un día», razón por la cual no servía «de nada» evadir esa realidad y tras esto, añadió: «Tienen que dejar de ser un país de maricas».

Esta nueva demostración de homofobia del gobernante generó malestar en la población, que de inmediato posicionó en las redes sociales la consigna: «todos somos maricas».

Bolsonaro ha sido duramente criticado por minimizar el efecto de la pandemia y no aplicar ninguna de las medidas sanitarias recomendadas por las autoridades sanitarias para frenar los contagios, aduciendo que no se puede paralizar la economía.

A las declaraciones irresponsables sobre el coronavirus, se suma ahora el ataque contra la comunidad homosexual, a quien despreció en su comentario, presentándola como sinónimo de una cobardía, en su criterio, injustificada.

(LaIguana.TV)