El régimen de Donald Trump, que tiene sus días contados para entregar el cargo al presidente electo Joe Biden el próximo 20 de enero, está tratando de mantener viva la figura alicaída de Juan Guaidó al gastar sus últimos cartuchos y asegurar que el autoproclamado seguirá siendo reconocido como «presidente interino» hasta que se vayan de la Casa Blanca.
La Administración Trump argumenta que «no reconocerán» las elecciones parlamentarias del próximo domingo 6 de diciembre, que forman parte del mandato constitucional debido al fin del ciclo legislativo del año 2015, porque según ellos son «ilegítimas».
Según la agencia de noticias del Reino de España EFE, un portavoz del Departamento de Estado estadounidense les confirmó que Washington «seguirá reconociendo» a Guaidó «después del 5 de enero», cuando tomará posesión la nueva Asamblea Nacional (AN, Parlamento) que será electa el próximo domingo y que cuenta con la participación de la mayoría de partidos de oposición, excepto las facciones sediciosas de un grupo de ellos que están vinculados a los intereses estadounidenses.
Estados Unidos pretende utilizar la misma táctica de 2018 cuando dijo que las elecciones eran fraudulentas, porque Maduro ganó con más de 60% de los votos por encima del candidato opositor Henri Falcón. Esto les ha servido para secuestrar dinero y bienes de Venezuela en el mercado internacional y dentro de Estados Unidos, con la complicidad de la Unión Europea.
Resalta EFE que aunque Trump «ha sido uno de los aliados más fieles de Guaidó, solo le quedarán quince días en el poder cuando tome posesión el nuevo Parlamento venezolano».
(LaIguana.TV)