En una entrevista con el periodista Vladimir Villegas, la primera vicepresidenta de la Asamblea Nacional, Iris Varela, sacó de su cartera un par de esposas, adminículo que, según confesó, lleva encima para ponérselas a Juan Guaidó, si se llegara a topar con él.
A su parecer, este proceder se fundamenta en lo contemplado en el artículo 44 de la Carta Magna, en el que se establece que si bien ninguna persona puede ser privada de libertad en ausencia de una orden judicial, también se precisa como excepción el que esta sea sorprendida en flagrancia.
«Donde lo vea, lo voy a detener, porque está cometiendo un delito en flagrancia», arguyó.
Además, según su punto de vista, su cargo le otorga la suficiente autoridad como para detener al exdiputado apelando a lo que consagra la Constitución venezolana, tras lo cual, prometió, lo entregaría a los órganos de administración de justicia.
(LaIguana.TV)