Este viernes 12 de febrero se conoció la noticia de asesinato de Orlando Antony Abreu Suárez, un venezolano de 27 años de edad, que fue asesinado en Trujillo, Perú, por un delincuente apodado «Cara cortada» tras, según medios internacionales, negarse a pagar vacuna por el puesto que regentaba en un mercado informal de la citada población.
Este no es el único caso de un connacional a quien le es arrebatada la vida en el mencionado país suramericano. En lo que va de año son varios los casos reseñados por la prensa sobre homicidios contra migrantes criollos.
El diario Correo de Perú informó que el pasado jueves 11 de febrero fue asesinado un connacional que fue identificado como José Manuel Sandoval Godoy (24), quien se desempeñaba como mototaxista.
La víctima recibió una puñalada en el tórax que le generó una muerte instantánea.
Hace tres días se conoció sobre el feminicidio cometido contra Laura Ruiz (21), quien fue asesinada frente a sus dos hijos, uno de cuatro y otro de tres años de edad, tras sostener una fuerte discusión con su victimario.
Este fue identificado como Wilmer Collazos Arbildo (49), quien se suicidó en el lugar. El hecho ocurrió en la localidad de San Martín de Porres.
Otro crimen fue perpetrado el 11 de enero de este año en Lima, capital del país inca. La víctima fue una pareja de connacionales que, al parecer, fue atacada por sicarios.
Los criollos fueron identificados como Diviana Farías González (26) y Jair Moreno Santos (25), quienes, según reporte policial, “se encontraban tomando alcohol en el segundo piso de la vivienda en la que se hallaban hospedados” cuando fueron sorprendidos por los desconocidos.
2020 sangriento
En noviembre del año pasado un joven de 22 años, identificado como Jhon Alexander Salazar Benavides, apodado “El Chamito” y que se desempeñaba como colector en un transporte público, falleció en medio de una discusión ocurrida en la población de Santa Clara en Perú.
Todo se originó cuando tuvo un cruce de palabras con el colector de otra unidad. Fue sacado de un autobús en movimiento.
Poco antes, el 24 de octubre, Yolimar Josefina Mosquera Mendoza (30) murió a manos de su expareja, identificada como Carlos Wilfredo Hernández Rodríguez (30), quien tras cometer el feminicidio se quitó la vida.
La mujer, que estaba embarazada, trabajaba en un restaurante ubicado en La Victoria, provincia de Perú.
El 2 de octubre la prensa peruana registró el asesinato a balazos de un joven de 22 años, de quien se desconoce la identidad, en el distrito de San Martín de Porres. La policía investiga como presunto móvil del crimen el posible cobro de cupo.
A finales del mes de septiembre de 2020 Osnery Prieto Urdaneta (34) fue degollada por un sujeto que la acosaba. El crimen ocurrió en Chorrillos, provincia de Lima.
El sujeto fue identificado como Rayme Rojas Marcano, quien se quitó la vida pocos minutos después de cometer el asesinato.
El 18 de abril se conoció sobre el feminicidio cometido contra Hayesa Navarro, de 32, quien falleció tras recibir cerca de 30 puñaladas a manos de su expareja, un exoficial de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), identificado como Gerardo Linares.
A este poco le importó que Navarro se encontrara en compañía de sus tres hijos y tres sobrinos, todos menores de edad, quienes fueron testigos del atroz hecho que ocurrió en la ciudad de Tacna, Perú.
En marzo de 2020 Yenser Bailey Mejía (28) murió tras recibir al menos seis disparos mientras cenaba en un restaurante, ubicado en el distrito Los Olivos. El joven era chofer de transporte público.
En febrero fue encontrado el cadáver de Joselyn Daniela Vásquez Hernández (22), quien murió tras salir de una discoteca. La joven era madre de una niña de 5 años.
En 2019 la situación no fue muy diferente. El 14 de diciembre se registró el asesinato de Luis Enrique Arias Taborda (18), quien recibió múltiples puñaladas a manos de varios vecinos que le exigían abandonar el país.
El crimen ocurrió en la zona de Morón, distrito de Chaclacayo.
(LaIguana.TV)