Los efectos de las medidas coercitivas unilaterales y bloqueos financieros impuestos por Estados Unidos y algunos países de Europa sobre Venezuela, han obligado al gobierno del presidente Nicolás Maduro a intentar formas alternativas de generación de ingresos y de diversificación industrial, que permitan superar la dependencia de la industria petrolera.
En ese orden, el filósofo, comunicador y analista político Miguel Ángel Pérez Pirela analizó en la edición 356 de su programa Desde Donde Sea la propuesta de Zonas Económicas Especiales (ZEE), planteada a dos manos entre el Ejecutivo y el Legislativo para remontar la dura crisis económica, que por sus implicaciones ha estado en el centro de la opinión pública.
Antes de entrar en materia, comentó que LaIguana.TV es el portal informativo más leído en Venezuela, según el ranking elaborado por la empresa especializada en tráfico de internet Alexa.
En ese orden, precisó que, de acuerdo con el mencionado ranking, LaIguana.TV lidera la lista de sitios de noticias más visitados en Venezuela y, asimismo, se ubica en el lugar número 52 a nivel nacional en el ranking general de todas las páginas web más leídas en el país. Esta posición, acotó, reivindica la preferencia y confianza de los venezolanos en el trabajo que se realiza en esta trinchera informativa.
A modo de referencia, indicó que muy por detrás se encuentran ubicados los siguientes portales de noticias: El Nacional (75), Últimas Noticias (82), La Patilla (87), El Pitazo (115) y El Universal (141).
¿Qué son las Zonas Económicas Especiales que impulsa el Gobierno Bolivariano?
Ya en el tema central, el comunicador señaló que, en una apuesta inédita para reactivar la golpeada economía local, el Gobierno de Venezuela anunció en mayo la discusión de una Ley Orgánica de Zonas Económicas Especiales –cuyo proyecto fue aprobado en primera discusión por la Asamblea Nacional el pasado 27 de abril–, que estaría orientado a captar inversión privada nacional y extranjera para la actividad industrial en diversos sectores.
El presidente Nicolás Maduro manifestó su deseo de que el proyecto se debatiera ampliamente entre los distintos sectores que serán afectados por esta legislación antes de su aprobación.
Pérez Pirela explicó que se trata de una iniciativa derivada de la Ley Antibloqueo, instrumento jurídico aprobado por la Asamblea Nacional Constituyente en octubre de 2020 y ratificado por el Legislativo el pasado abril, con el que se pretende sortear las sanciones de Estados Unidos y la Unión Europea.
Detalló, asimismo que, según sus impulsores, las llamadas Zonas Económicas Especiales (ZEE) están concebidas como ejes de desarrollo y fuentes de ingreso en lugares que cuentan con ventajas para la actividad industrial en las que rigen regulaciones especiales.
Añadió que voceros gubernamentales como el ministro de Planificación, Ricardo Menéndez, insisten en que este planteamiento no es nuevo. Según él, fueron sugeridas por el expresidente Hugo Chávez, quien sostenía que eran la solución para superar la ausencia de diversificación de la economía nacional.
También indicó que Maduro ha asegurado que, aunque la ley que regulará el funcionamiento de las ZEE haya surgido en un contexto de bloqueos financieros y medidas coercitivas unilaterales sobre la industria petrolera, debe adaptarse «a la Venezuela posbloqueo».
Más precisamente, el mandatario exhortó a su equipo para que «pensara muy bien» la manera en que debían implementarse las ZEE para que se tradujeran en la generación de capital y riqueza más allá de las condiciones que han impuesto el bloqueo y las sanciones, señaló el analista.
Con respecto a la localización de las ZEE, comentó que hasta el momento se han delimitado cinco: Paraguaná (Falcón, centroccidente), Puerto Cabello (Carabobo, centroccidente), Morón (Carabobo, centroccidente), La Guaira (estado La Guaira, centro) y Margarita (Nueva Esparta, oriente), todas en la franja norte-costera de Venezuela, aunque no se descarta su expansión hacia otros puntos de la geografía nacional.
Este primer grupo de emplazamientos, según los voceros oficiales, cuenta con las condiciones apropiadas para su instalación, como puertos y aeropuertos cercanos a zonas industriales y áreas de producción, agregó.
¿Cómo ha planteado el gobierno las ZEE?
Seguidamente, el experto analizó las aparentes ventajas económicas que supondría para el país la adopción del modelo de ZEE, con base en los testimonios y explicaciones aportadas por sus promotores.
Así, recuperó las declaraciones que uno de ellos ofreciera a la agencia Sputnik, en las que aseguró que el objetivo es beneficiar a la industria que ya existe en esas localidades en las que se autorizará la instalación de ZEE a través de incentivos como la exoneración de impuestos.
En este marco, sostuvo Pérez Pirela, sus proponentes también ponen el acento en las oportunidades con las que podría contar el país para obtener créditos internacionales, como puede leerse en el artículo «Ley de Zonas Económicas Especiales estipulará la oferta de créditos internacionales», que puede leerse en el portal de LaIguana.TV.
Los defensores de la propuesta precisan que uno de los principales objetivos de la ley de ZEE es abrir las puertas a la banca internacional, lo que se lograría bajo el amparo de la Ley Antibloqueo, que autoriza a las distintas instancias del Gobierno de Venezuela a suscribir privadamente contratos de alta envergadura con particulares, con el propósito de eludir las sanciones estadounidenses.
Incluso, diputados opositores como el pastor evangélico Javier Bertucci, se han mostrado a favor de de las ZEE, defendiendo las ventajas de este esquema económico, incluyendo los bajos salarios.
De otro lado, Jesús Faría, economista que preside la Comisión de Finanzas y Desarrollo Económico de la Asamblea Nacional, explicó a fines de mayo que la propuesta fue elaborada a partir del estudio de experiencias similares adoptadas en países como China, Vietnam, Singapur o Corea del Sur, relató el analista.
A modo de síntesis, puntualizó que Faría aseguró que las ZEE surgieron en países que por razones varias tenían acceso limitado a las divisas, por lo que se vieron obligados a realizar «esfuerzos extraordinarios» orientados a diversificar la industria y favorecer la exportación.
Tras esto, el parlamentario relató que se generaron nuevos empleos y se incrementaron los ingresos, situación que permitió reactivar el aparato productivo, subsanar el déficit de acceso a divisas y superar el estancamiento económico, y frente a los cuestionamientos, subrayó que en el caso venezolano las ZEE se desarrollarán bajo la rectoría del Estado y sin que eso implique la adopción de políticas neoliberales.
Pérez Pirela comentó que, en cuanto a su implementación práctica, aún quedan muchos asuntos por definirse y aclararse, muy particularmente en los relativos al tipo de compañías que se autorizarán, así como a las relaciones laborales que imperarán.
Uno de los puntos opacos es el tipo de empresas que funcionarán en las ZEE y para el análisis, resaltó que Juan Arias, viceministro con competencia en la materia, se rehusó a aportar mayores precisiones, alegando la situación de bloqueo que padece el país.
Concretamente, en entrevista con el periodista Clodovaldo Hernández para su programa Cara a Cara, hizo referencia a «inversiones importantes» que pertenecerían principalmente a empresarios nacionales y restó importancia a la procedencia o signo ideológico de los inversores.
En la misma conversación, Arias también aseguró que la aparición de las ZEE no implicará la derogación de la Ley Orgánica del Trabajo e indicó que producto de la discusión con sectores organizados de los trabajadores, se avanzan propuestas relativas al reparto de un porcentaje de los excedentes de los empresarios entre los asalariados y las comunidades adyacentes.
El funcionario insistió en que la diferencia en relación con las condiciones que rigen en el resto del país, radicaría en un ventajoso marco impositivo y aduanero que le será aplicado a los empresarios que inviertan en ellas.
¿Cómo serían los salarios y relaciones laborales en las ZEE?
Por su parte, para el analista venezolano, uno de los grandes temas en cuestión con el proyecto de ZEE que se avanza desde el gobierno, es la situación de los salarios y las relaciones económicas entre los patronos y los trabajadores, tras la entrada en vigor del modelo.
En alusión a la entrevista de Arias con LaIguana.TV, señaló que el viceministro desestimó los cuestionamientos de quienes aseguran que en las ZEE los trabajadores perciben salarios muy bajos, aduciendo que, si es el caso, no se trata de un problema asociado a las ZEE, sino que es atribuible a la situación salarial del país en el que estas operan.
«Generalmente, los salarios en las zonas económicas de un país son mejores que en el resto del país (…), porque en esa zona económica se exporta, se reciben divisas y hay una capacidad ociosa muy baja; se trabaja mucho», siguiendo estándares del comercio internacional, refirió el filósofo, citando al mentado funcionario.
¿Venezuela se dirige al neoliberalismo y a las maquilas? Las críticas a las ZEE
En el parecer de Miguel Ángel Pérez Pirela, el caso del salario es apenas una de las aristas criticadas por personalidades, de cara a la nueva política económica, pues entre otros señalamientos los críticos apuntan que uno de los peligros de las promesas de esas zonas económicas es que no resulte en la inversión productiva, tal y como está planteada, sino abone el terreno para la implementación de un nuevo ALCA –Área de Libre Comercio de las Américas– disfrazado.
Entre los detractores, destacó la voz del Luis Britto García, que ha publicado varios artículos en medios nacionales en los que objeta, por ejemplo, que las zonas vendrán a convertirse en maquilas.
Así, citándole, precisó que la maquila «es el modelo privilegiado para la explotación globalizada del trabajo», en el que «las transnacionales se instalan en un país del tercer mundo para cumplir total o parcialmente un proceso cuyo producto se exporta en su casi totalidad, a fin de aprovechar la baratura de la mano de obra y la ausencia de impuestos».
Adicionalmente, siguiendo a Britto García, destacó que «las maquilas o zonas especiales solo benefician a las transnacionales y arrojan efectos negativos para todos los demás participantes. Para la clase trabajadora, que labora en ellas en condiciones de discriminación sexista, sobreexplotación y remuneración ínfima, a la cual arrebatan la totalidad las conquistas sociales y laborales ganadas mediante arduas luchas de décadas».
Otra de las posiciones críticas que sumó el experto a su reflexión fue la de Oscar Figuera, secretario general del Partido Comunista de Venezuela, quien en Twitter criticó la ley y la calificó como «una puñalada» a la soberanía nacional y a los derechos de los trabajadores.
Regresando a los alegatos de Britto García en contra de las ZEE es que el Estado también se ve perjudicado porque, citó a continuación, que «en virtud de los infames tratados contra la doble tributación, contratos de estabilidad tributaria, exenciones, exoneraciones y otros privilegios inconstitucionalmente otorgados a las transnacionales, prácticamente no percibe de estos impuestos con los cuales costear la educación, salud y pensiones de los trabajadores y otros gastos indispensables».
También la economista y profesora universitaria Pasqualina Curcio usó las redes sociales para apuntalar sus preocupaciones en relación con las implicaciones de la puesta en marcha de las ZEE, después de la aprobación en primera discusión del proyecto en la AN, en las que resaltan, además de la soberanía, los recursos naturales y el trato a los trabajadores.
El comunicador, basándose en Britto García, señaló que, según este intelectual, los perjuicios de las maquilas se extienden también a la economía del país en el que se instalan, puesto que «solo opera una fase del proceso productivo, y casi nunca recibe para su consumo interno la producción maquiladora, en su mayoría destinada a mercados externos y a precios incosteables para los nacionales».
Agregó, asimismo, que estos efectos negativos también alcanzan a la soberanía nacional, pues esta «pasa a ser fragmentada en zonas donde no se aplican las leyes de la República ni operan sus tribunales, como si hubieran sido militarmente ocupadas por potencias extranjeras».
Del lado del gobierno, el viceministro Juan Arias salió al paso de las críticas formuladas en contra de las ZEE, que las califican como maquilas, aseverando que en Venezuela no está planteado algo semejante.
Para cerrar los argumentos en contra de esta iniciativa gubernamental, señaló que Luis Britto García también advierte sobre el costo que pagarían «las organizaciones políticas gestoras» si optasen por implementar las ZEE, trayendo a colación que «Rafael Caldera dio el primer paso para la instalación de maquilas en nuestro país en 1997 con la anulación de la retroactividad de las prestaciones sociales y demás conquistas laborales. Su partido no volvió a ganar jamás una elección».
Un caso cercano: México eliminó las Zonas Económicas Especiales en 2019
Las ZEE son comunes en América Latina y a contrapelo de la tendencia regional, Pérez Pirela relató que, en abril de 2019, el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador anunció que desaparecerían las Zonas Económicas Especiales que habría creado su antecesor en el sur y sureste del país, por no cumplir con el fin para el que fueron creadas.
Para aportar contexto, Pérez Pirela mencionó que, en 2016, la administración de Enrique Peña Nieto impulsó la creación de siete ZEE con el objetivo de cerrar la brecha económica presente entre el sur y el resto del territorio azteca.
La decisión de López Obrador, aunque polémica, no fue del todo inesperada, pues previamente, funcionarios de su gobierno habían avanzado que las ZEE podrían desaparecer.
A ese respecto, recordó que, en su momento, Rafael Marín Mollinedo, jefe de la Autoridad Federal para el Desarrollo de las Zonas Económicas Especiales, indicó que el excesivo número favorecía la competencia entre las empresas, a costa de perder la capacidad de producir ingresos suficientes para el fisco que pudieran destinarse al desarrollo.
Más específicamente, Mollinedo explicó que «hay expertos que nos han venido a hablar, como el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo, dicen que está bien que se establezca una ZEE, dos máximo, pero ya al tener siete pulverizas no se concentra el desarrollo».
A modo de conclusión y antes de dar paso a las intervenciones de la audiencia, destacó que, en este caso, una vez concretada la desaparición de las ZEE, el gobierno de AMLO apostó al financiamiento prioritario de proyectos de desarrollo regional, sin que todavía esté claro cuán beneficiosa resultó la decisión.
(LaIguana.TV)